Esta tarjeta está orientada a jugar en Full HD (1080p) con altos ajustes de calidad en la mayoría de juegos modernos, y en muchos casos puede alcanzar 60 fps o más con buenos ajustes.

También puede manejar QHD (1440p) en muchos juegos con ajustes medios/altos, aunque en juegos más exigentes puede que haya que bajar ciertos efectos para mantener buen rendimiento.

No está diseñada para juegos en 4K con calidad ultra, pero sí podría servir en 4K ajustando bastante las opciones gráficas.

Gracias a sus 6 GB de VRAM, tiene suficiente memoria para texturas modernas en 1080p / 1440p en la mayoría de los títulos actuales.

El consumo de energía es relativamente moderado para su clase (aproximadamente 120 W), lo cual la hace más amigable en configuraciones de PC con fuentes no excesivamente potentes, siempre que la fuente sea de calidad.